Un sueño...
Hace unos días tuve un sueño raro...soñé que tenía una beba hermosa. La bañaba, jugaba con ella, la mimaba...no había palabras en mi sueño, sólo veía imágenes de mi criaturita que parecía muy feliz.Cuando me desperté me sentí perturbada. Todavía estaba medio dormida y no entendía bien si había sido un sueño o si era una realidad. Busqué a mi nena pero no la encontré y ahí comprendí que realmente mi vida era otra. Me sentí aliviada pero me quedé pensando...
Pensé en el hermoso privilegio que debe ser tener un hijo, pero también en la gran responsabilidad que implica.
Pienso en mi historia como hija y veo a mis papás que siempre me dieron su amor, con sus errores obviamente, pero siempre me acompañaron en amor.
Mi mamá, una mujer valiente, fuerte, me enseñó lo que es la sencillez y la dignidad. Se enfrentó a situaciones muy duras pero siempre salió victoriosa por ser una mujer honrada y buena.
Mi papá, un hombre creativo, astuto, me enseñó que siempre se puede volver a empezar, y que no hay que bajar los brazos jamás porque no estamos solos.
¿Qué les puedo decir? Espero el día de mañana poder tomar esos ejemplos y transmitírselos a mis hijos. Tomemos lo bueno de nuestros padres y de nuestros seres queridos.Me di cuenta que muchas veces me manejé por medio del enojo y el resentimiento; pero aprendí que algo sabio es poder apropiarme de aquello hermoso que tienen los que me rodean y no condenarlos por sus errores, sino poder amarlos tal cual son.
A todos ustedes, que siempre leen mis delirios, les agradezco por ser parte de mi vida y por aportar tantas cosas buenas.Todos tenemos virtudes y defectos, lo hermoso es poder caminar juntos así, tal cual somos...
Pensé en el hermoso privilegio que debe ser tener un hijo, pero también en la gran responsabilidad que implica.
Pienso en mi historia como hija y veo a mis papás que siempre me dieron su amor, con sus errores obviamente, pero siempre me acompañaron en amor.
Mi mamá, una mujer valiente, fuerte, me enseñó lo que es la sencillez y la dignidad. Se enfrentó a situaciones muy duras pero siempre salió victoriosa por ser una mujer honrada y buena.
Mi papá, un hombre creativo, astuto, me enseñó que siempre se puede volver a empezar, y que no hay que bajar los brazos jamás porque no estamos solos.
¿Qué les puedo decir? Espero el día de mañana poder tomar esos ejemplos y transmitírselos a mis hijos. Tomemos lo bueno de nuestros padres y de nuestros seres queridos.Me di cuenta que muchas veces me manejé por medio del enojo y el resentimiento; pero aprendí que algo sabio es poder apropiarme de aquello hermoso que tienen los que me rodean y no condenarlos por sus errores, sino poder amarlos tal cual son.
A todos ustedes, que siempre leen mis delirios, les agradezco por ser parte de mi vida y por aportar tantas cosas buenas.Todos tenemos virtudes y defectos, lo hermoso es poder caminar juntos así, tal cual somos...
